Después de estar años trabajando cada uno por su lado, en 2011 decidimos iniciar una nueva etapa y abrir un espacio de trabajo en común. Queríamos hacerlo a pie de calle para ganar visibilidad y cercanía con la gente. Pensamos que el diseño tenía que reflejar nuestra manera de entender la arquitectura, cómo concebimos el espacio y nuestro gusto por la madera. Y si además conseguíamos ajustar el presupuesto sería perfecto!!

Mantuvimos aquellos elementos existentes imprescindibles, pero algo deteriorados (aseo y falso techo aislado) y los ocultamos con una envolvente hecha a nuestra medida, en madera y yute. Madera en paredes con un entablado de abeto pintado que recorre el local de adelante a atrás plegándose y curvándose para definir distintas estancias dentro de un único espacio. Madera en armarios y muebles hechos con tablero de dm lacado con líneas rectas y limpias para equilibrar las curvas. Madera en el suelo con parqué industrial de roble, que daba calidez al conjunto. Y en el techo, yute, la tela de saco de toda la vida para darle personalidad al local…y de paso tapar el falso techo.

Quedamos muy contentos con el resultado y esperamos tu visita para conocer tu opinión!