Villa Patricia es tesón y pasión. El deseo que han demostrado Patricia y Alberto para construir su casa ha sido inmenso.
Hemos desarrollado distintas propuestas a fin de poder conjugar presupuesto y necesidades. Sin embargo, distintas vicisitudes económicas no hacían recomendable emprender tal inversión. Ahora, después de un par de años, habiendo ponderado nuevamente todos los gastos y el presupuesto disponible, hemos desarrollado un proyecto definitivo que intenta dar respuesta a todas las necesidades de esta pareja y sus dos niñas.
Un ejercicio de contención, donde no hay margen para el ornato, pero sí interés en adaptarse a la fisionomía de la parcela. Una finca estrecha y alargada en el Ayuntamiento de Teo, donde destacan unos robles majestuosos en su extremo.
La voluntad de poder disfrutar de un lugar tranquilo, sin estridencias, y contemplar la naturaleza era la premisa imperante. Por lo tanto, la arquitectura resultante, no es más que la respuesta a estas condiciones, traducido en grandes huecos hacia los árboles (Sur Este), desde el salón y la cocina, incluso contemplando la posibilidad de poder crecer en un futuro con un porche. Por lo demás, se escalona la vivienda a fin de adaptarse a una suave topografía. En ese punto, se fija la entrada de la vivienda, donde se aprecia la amplitud del espacio y donde la inclinación de las cubiertas define la concatenación de estancias.
Nos complace enormemente el haber podido ser partícipes de este proyecto y haber podido contribuir a hacer posible un sueño.
